Con nueve resistieron, pero sin puntos regresaron: el Cazalegas necesita un golpe de efecto ante el filial albaceteño

El Cazalegas busca reencontrarse con la victoria tras dos derrotas seguidas y un último partido marcado por las expulsiones. Los de Kuki Arriero, penúltimos, reciben al Atlético Albacete con urgencias y la obligación de reaccionar ante su afición.

El C.D. Cazalegas – Ébora Formación afronta este domingo (12.00 horas, Ciudad Deportiva Ébora) una de esas citas que, sin ser decisivas, empiezan a marcar el rumbo de una temporada. El equipo de Kuki Arriero llega tocado tras dos derrotas consecutivas la última, especialmente dolorosa, en La Solana (1-0) en un partido que terminó con nueve jugadores y un sabor amargo y con la urgencia de reencontrarse con la victoria ante su afición. La expulsión temprana de Guti y la posterior doble amarilla a Iker condicionaron un choque que el cuadro cazalegueño compitió con entereza hasta que un solitario tanto de Aarón, a ocho minutos del final, dictó sentencia. Más allá del resultado, el técnico toledano se mostró preocupado por las sensaciones y por una plantilla que sigue castigada por sanciones y ausencias. El rival de este domingo, el Atlético Albacete “B”, llega en dinámica positiva tras un arranque sólido en el Grupo XVIII, instalado en la zona media-alta de la tabla con trece puntos. El filial manchego, dirigido por un cuerpo técnico joven pero ambicioso, ha mostrado un fútbol atrevido y vertical, con talento en las bandas y una presión alta que exigirá al Cazalegas máxima concentración desde el inicio.

En el cuadro naranja, el técnico no podrá contar con los sancionados Guti e Iker, ni con Mayoral, todavía en proceso de recuperación. Se espera que la zaga experimente ajustes y que hombres como Reina o Cabañas puedan tener más protagonismo. La incógnita estará en el once inicial, donde Arriero podría apostar por reforzar el centro del campo para equilibrar el juego interior de los albaceteños. En el vestuario hay conciencia de que el margen de error se estrecha. El Cazalegas, penúltimo con solo cuatro puntos, necesita recuperar la confianza y volver a sentir el respaldo de su público, que ha sido un factor diferencial en la única victoria cosechada hasta la fecha en Ébora. El duelo, además, llega con tintes de redención. No solo se trata de sumar, sino de volver a competir con la intensidad y el orden que caracterizaron al equipo en el tramo inicial de la temporada. Si algo ha dejado claro este grupo es que en la Tercera Federación no hay tregua: cada error se paga y cada punto cuesta un mundo. El Cazalegas, que ha demostrado coraje incluso en la adversidad, busca reencontrarse con su mejor versión ante un rival que pondrá a prueba su madurez. En Ébora, donde el aliento de la grada siempre empuja, el equipo de Arriero quiere empezar a escribir un nuevo capítulo, uno que hable de reacción, compromiso y fe en el camino.

Redacción: Óscar Bonilla

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